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Turquía solicita su adhesión a los BRICS para ampliar su influencia global

Ankara busca fortalecer sus lazos más allá de Occidente y asegura que el centro geopolítico se está desplazando hacia las economías emergentes, según fuentes.

Turquía ha presentado formalmente su solicitud para unirse al grupo BRICS, según informó la agencia Bloomberg, citando a fuentes cercanas a la situación. Este movimiento refleja la intención de Ankara de redirigir su política exterior hacia nuevas alianzas estratégicas en un contexto de crecientes tensiones con sus tradicionales aliados occidentales.

El bloque BRICS, integrado actualmente por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, ha ganado relevancia en la arena global como un contrapeso a las economías desarrolladas. Recientemente, el grupo experimentó una expansión significativa con la incorporación de nuevos miembros, incluidos Egipto, Etiopía, Irán, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos, el 1 de enero de este año. Turquía, al igual que otros países como Malasia, Tailandia y Azerbaiyán, ha manifestado su interés en formar parte de este grupo en expansión.

La solicitud de adhesión de Turquía se realizó hace varios meses, en medio de una aparente frustración por la falta de progresos en su proceso de integración a la Unión Europea. Las fuentes consultadas por Bloomberg indican que la administración del presidente Recep Tayyip Erdogan considera que el «centro de gravedad geopolítico se está desplazando lejos de las economías desarrolladas», lo que ha llevado a Ankara a explorar nuevas oportunidades y alianzas fuera de Occidente.

Además, el interés de Turquía por los BRICS también se ve impulsado por sus desacuerdos con varios países de la OTAN, exacerbados por la estrecha relación que Ankara ha mantenido con Moscú tras el inicio del conflicto en Ucrania. Este acercamiento a Rusia, en medio de un contexto internacional tenso, ha generado fricciones con sus aliados en la OTAN, lo que ha incentivado a Turquía a buscar alternativas en el escenario global.

Se espera que la posible ampliación del BRICS, incluyendo la solicitud de Turquía, sea debatida durante la cumbre del grupo que se celebrará en Kazán, Rusia, en octubre. Esta reunión podría marcar un punto de inflexión en la redefinición de alianzas globales, donde países emergentes como Turquía buscan desempeñar un papel más significativo.

El interés de Ankara por unirse a los BRICS subraya una tendencia más amplia de realineamiento geopolítico, en la que las economías emergentes están jugando un papel cada vez más central en la configuración del orden mundial. La evolución de esta solicitud, y las respuestas de los actuales miembros del BRICS, podrían tener un impacto significativo en el futuro de la diplomacia y la economía global.

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